Hoy en día, Barroco español es un tema que ha cobrado relevancia en diversos ámbitos. Desde la política hasta la ciencia, Barroco español se ha convertido en un punto de interés para investigadores, activistas, y ciudadanos en general. Con el avance de la tecnología y la globalización, Barroco español ha adquirido una dimensión nunca antes vista, impactando no solo en la forma en que interactuamos con nuestro entorno, sino también en nuestra percepción del mundo. En este artículo, exploraremos diferentes aspectos relacionados con Barroco español, desde sus orígenes hasta su impacto en la sociedad moderna.
Barroco español es un concepto de la historiografía del arte, de la literatura y de la música, y genéricamente de la historia de la cultura que se utiliza para clasificar y definir las manifestaciones culturales de la época del Barroco (aproximadamente el siglo y medio entre 1600 y 1750) localizadas en España.
Aunque es más propio para la época denominar Monarquía Hispánica o Imperio español al espacio político gobernado por el rey de España o Su Católica Majestad (los Austrias menores -Felipe III, Felipe IV y Carlos II- y el primer Borbón -Felipe V-), la bibliografía suele delimitar la extensión del uso de la expresión "Barroco español" a las producciones artísticas de la Corte (en Madrid excepto el breve periodo de 1601-1605 en que estuvo en Valladolid) y a las de los territorios de las Coronas de Castilla y de Aragón y el reino de Navarra. En ese espacio, no homogéneo, también se distinguen escuelas locales, especialmente la escuela madrileña (o Barroco madrileño), la escuela sevillana (o Barroco sevillano), la escuela valenciana (o Barroco valenciano), la escuela vallisoletana (también denominada castellana o de Gregorio Fernández -Barroco vallisoletano o castellano-), la escuela salmantina (o Barroco salmantino o churrigueresco), la escuela gallega (o Barroco gallego), la escuela catalana (o Barroco catalán), la escuela aragonesa (o Barroco aragonés), etc. Para la región de Murcia y el Levante se ha definido un estilo local denominado Barroco mediterráneo.
No suelen englobarse en el término Barroco español ni el Barroco portugués (Portugal se independiza en 1640), ni el Barroco italiano de Milán, Sicilia o Nápoles (con la presencia de José Ribera el Españoleto), ni el Barroco flamenco, ni siquiera el Barroco colonial americano o filipino (arte colonial hispanoamericano), aunque a veces se emplea la expresión Barroco español en América o Barroco hispanoamericano. El denominado Barroco novohispano hace referencia al virreinato de Nueva España.
Exceso ornamental: Algunos críticos señalan que el Barroco español a veces tendía hacia un exceso decorativo y teatral, lo que podía resultar en composiciones recargadas y melodramáticas.
Falta de diversidad temática: Aunque el Barroco español produjo obras maestras en géneros como la pintura religiosa y el retrato cortesano, algunos críticos argumentan que hubo una limitada diversidad temática en comparación con otros movimientos artísticos contemporáneos en Europa.
Contexto histórico y social: El Barroco español estuvo marcado por un contexto histórico de decadencia política y económica, así como por tensiones religiosas. Algunos críticos consideran que estas circunstancias influyeron en el tono melancólico y sombrío de muchas obras barrocas.
En conclusión, el Barroco español fue un periodo artístico notable que produjo obras maestras icónicas y reflejó la rica complejidad de la sociedad y la cultura de la época. Si bien recibió críticas en ciertos aspectos, su legado perdura como una parte integral de la historia del arte europeo, contribuyendo con innovaciones técnicas y expresivas que influyeron en generaciones posteriores de artistas.
Para las artes plásticas dentro del arte barroco en España la historiografía del arte se limita habitualmente a las denominadas "artes mayores" (pintura, escultura y arquitectura).